Una de las mejores formas de garantizar un buen día es tener una rutina matutina sólida. Una rutina matutina puede ayudarte a despertarte y concentrarte antes de comenzar el día. Puede ayudar a equilibrar su vida cuando las cosas se vuelven un poco caóticas. Un error común es pensar que la rutina matutina debe ser larga y complicada. En realidad, debe adaptarse a quién eres como persona. En SOBA Hibiscus animamos a vivir una vida equilibrada; fijar una rutina matutina constante pero flexible puede ayudarle a encontrar algo de equilibrio en su vida. Tómate este tiempo para concentrarte en ti mismo y controlar tu cuerpo y tu mente. Esta es una excelente manera de asegurarse de cuidarse a sí mismo y al mismo tiempo cuidar a los demás. A continuación se presentan algunos elementos básicos que le ayudarán a crear una rutina matutina que funcione para usted.
1) despierta
Es importante despertarse con tiempo suficiente para prepararse por completo, de modo que no salga corriendo por la puerta y pierda el equilibrio. Estresarse por llegar tarde nunca es divertido. Ahora bien, esto no significa que tengas que levantarte a las 5:00 a. m. todas las mañanas, excepto si tienes obligaciones religiosas o meditas durante este tiempo. Digamos que solo le toma una hora prepararse, 20 minutos llegar al trabajo y el trabajo comienza a las 8:00 a. m., su hora de despertarse debe ser alrededor de las 6:30 a. m. Utilice este concepto para determinar cuánto tiempo necesita para prepararse y cuánto tiempo le lleva llegar a donde necesita ir.
2) Establece tu estado de ánimo
Es importante comenzar el día con la mentalidad adecuada. Una excelente manera de hacer fluir las buenas vibraciones es estableciendo tu intención. ¿Cómo quieres presentarte hoy? Si, como a mí, te gusta escribir un diario, intenta escribir tus intenciones y afirmaciones. Estas afirmaciones pueden ser tan simples como "Soy una persona amable", "Va a ser un buen día", "Sé lo que estoy haciendo" o "Estoy justo donde necesito estar". Estas sencillas palabras pueden ayudarte a sentirte mejor contigo mismo y con el día que te espera. Una mentalidad positiva equivale a una vida positiva. Cada día tenemos la opción de ver la vida con todos sus defectos o la opción de ver la vida con todas sus infinitas posibilidades. La decisión es tuya.
3) Prepárate
La idea de “prepararse” es un concepto muy vago y diferente para cada persona. A algunas personas les gusta ducharse por la mañana como una forma de despertarse y mantenerse limpias. Si no te gusta ducharte por la mañana (tal vez te duches por la noche), considera lavarte la cara para despertar tu mente y tu cuerpo. Si tienes una rutina de cuidado de la piel, aquí es donde la incluirías en tu rutina matutina completa. Uno de los pasos más importantes al prepararse es cepillarse los dientes y mantener una excelente higiene personal en general. Elige un atuendo que te haga sentir seguro y represente cómo te percibes a ti mismo o quieres ser percibido. Prepararse puede incluir peinarse y maquillarse si decide usar maquillaje. Todo lo que necesitas para lucir tranquilo y confiado.
4) Desayuna
Todos conocemos el dicho “el desayuno es la comida más importante del día”. Tiene algo de verdad. Es importante comer algo por la mañana para asegurarse de tener energía para el día. Algunas comidas fáciles de preparar son tostadas de aguacate, avena durante la noche o huevos revueltos. El desayuno también puede incluir una bebida. Podría ser agua, café, jugo o té de hibisco. Prueba a completar tu rutina matutina con una agradable y refrescante bebida SOBA Hibiscus.
5) Salir
Antes de partir, verifique que tenga todo lo que necesita. Esto podría ser asegurarse de tener todos sus libros de texto y carpetas para la escuela o verificar que tenga su computadora para trabajar. Una vez que esté listo para comenzar, comience el día o encienda su computadora si está trabajando desde casa o la escuela. Ahora puedes empezar el día bien, tranquilo y preparado.
Cree su propia rutina matutina personalizada con nuestra sencilla guía SOBA Hibiscus y comparta su progreso en los comentarios a continuación.
Por Kelli Kamphaus